La publicidad en wearables y su enorme potencial de crecimiento se han convertido en una de las tendencias de actualidad. Pero, ¿tienes claro qué son estos dispositivos electrónicos y en qué consiste su tecnología? En este artículo te vamos explicar en qué campos se está aplicando la tecnología wearable y analizaremos cómo ha sido su evolución en los últimos años.
¿Qué son los Wearables y en qué consiste su tecnología?
Los wearables, que forman parte del Internet de las Cosas (IoT), hacen referencia al conjunto de dispositivos electrónicos que se incorporan en alguna parte de nuestro cuerpo, ya sea a través de la ropa que llevamos puesta, de algún complemento o incluso de aparatos implantados en nuestro propio cuerpo, como es el caso de los sensores con fines médicos implantados en pacientes.
Estos dispositivos interactúan con el usuario que los porta y con otros dispositivos en tiempo real con la finalidad de realizar alguna función específica. En definitiva, los wearables englobarían a todos aquellos aparatos electrónicos que llevan un microprocesador capaz de capturar datos y proporcionar servicios funcionales a los que los utilizan, y que además nos acompañan allá donde vayamos, llegando a formar prácticamente parte del usuario.
Productos como los smartwatches, monitorizadores de fitness, ropa, zapatillas con GPS, joyas inteligentes, implantes o e-tatuajes, entre otros, serían algunos ejemplos de dispositivos que pertenecen a este tipo de tecnología, la cual se encuentra cada vez más presente en nuestras vidas.
Por otro lado, dispositivos electrónicos como televisores, máquinas de café, robots de cocina o e-books, no se consideran wearables ya que, aunque se trata de productos que poseen microprocesadores y son utilizados a diario, no interactúan de forma continua con el usuario ni acompañan a este a todas partes, por lo que no se pueden considerar productos “llevables”, “ponibles” o “vestibles” (traducción de la palabra inglesa “wearable”).
Campos en los que se usa la tecnología wearable
Los dispositivos “ponibles” se encuentran presentes en un extenso abanico de campos y según su uso se pueden dividir en cinco grandes grupos: medicina y salud, industria textil, deporte y bienestar, entretenimiento e industria militar.
Esta tecnología tiene la finalidad de mejorar nuestra calidad y hábitos de vida a través del uso de diferentes dispositivos. A continuación, te enseñamos algunos ejemplos concretos de dispositivos wearable y los usos en los que se emplean:
- Smartwatches: son relojes inteligentes, cuyas funcionalidades pueden ir desde la monitorización de la frecuencia cardíaca y la presión arterial hasta la notificación en el propio reloj cuando te llega un mensaje o llamada al móvil.
- Cascos de bomberos con tecnología wearable: se trata de cascos que controlan los niveles de oxígeno y la temperatura máxima a la que puede resistir el bombero cuando éste trate de extinguir un incendio, además llevan incorporados un GPS para poder conocer en todo momento la localización del bombero. Su finalidad es mejorar la seguridad de los trabajadores.
- Prendas infantiles que pueden medir la temperatura de tu bebé, las cuales te avisan a través de tu smartphone cuando el bebé tiene fiebre.
- Sensores que controlan la cantidad de glucosa: son sensores que están enfocados a controlar la cantidad de glucosa en pacientes con diabetes a través de un dispensador electrónico, el cual inyecta de forma automática la cantidad de insulina precisa. Además, este mismo sensor es capaz de tomar datos relevantes sobre la salud del paciente.
Evolución y penetración de los dispositivos wearable
A pesar de que en la actualidad cada vez son más los usuarios que disponen de algún dispositivo wearable y de que cada vez encontramos una mayor gama de productos y campos en los que se puede aplicar la tecnología wearable, la realidad es que el ritmo de crecimiento y penetración de este tipo de productos está siendo más lento de lo esperado.
En la siguiente gráfica se puede observar el tanto por ciento de penetración de los wearables en diferentes mercados hasta la fecha julio de 2016.
Como puedes observar en la gráfica, es en Estados Unidos donde los wearables tienen más adeptos a fecha de julio de 2016 (el 15,2% de los estadounidenses posee un dispositivo wearable), seguido por Australia con un 13,7%, mientras que en los principales mercados europeos el nivel de penetración se sitúa en el 8,1%, según los últimos datos del estudio global sobre wearables de Kantar Worldpanel ComTech.
Estas cifras demuestran que esta nueva categoría de tecnología de consumo se está afianzando en el mercado, pero a un ritmo más lento del esperado.
Lo que sí que está claro, es que a pesar de que el mercado de los wearables aún no ha llegado a explotar, el aumento de su popularidad es indiscutible. Por este motivo los anunciantes deben aprovechar esta gran oportunidad y comenzar a explorar este nuevo terreno lleno de información útil y relevante.
Los Wearables: un nuevo reto para los anunciantes
La aparición de estos dispositivos ha supuesto sin lugar a duda una gran oportunidad para los anunciantes, ya que al tratarse de una tecnología que “llevamos puesta”, la medición y recopilación de datos se produce de forma continua y en tiempo real. Si se pìensa detenidamente, es como si el usuario retransmitiese su vida en directo, algo que es sumamente valioso para los anunciantes y que permitirá conocer qué es lo que el usuario precisa y en qué momento exacto lo necesita. Esto permitirá definir un target mucho más concreto, pudiendo lanzar un mensaje relevante para el usuario y en el instante preciso.
Uno de los pilares fundamentales que ofrece la publicidad en wearables es la capacidad de segmentación que ofrece. Al conocer exactamente la actividad que está desarrollando el usuario, así como el lugar exacto por el que transita, los anunciantes podrán ofrecerle a dicho usuario justamente lo que necesita, disminuyendo así la percepción de intrusismo por parte del receptor.
Te mostramos un par de ejemplos para ver esta gran ventaja claramente: imagina que un usuario ha salido a correr y la aplicación de su pulsera de actividad física detecta cuando este se detiene. Sería el momento idóneo para lanzar un mensaje publicitario con alguna promoción para adquirir una bebida o barrita energética cerca de la ubicación en la que se encuentra el usuario. O incluso lanzar ofertas publicitarias de chubasqueros o paraguas en tiendas cercanas a la ubicación del usuario si de repente empezase a llover.
Además de esto, no hay que olvidar que los wearables forman parte del Internet de las cosas, para el cual se prevé una explosión en los próximos años. Todo estará conectado: electrodomésticos, automóviles, wearables, móviles, etc. La recolección de datos, que aún es costosa en muchos casos, dará un giro de 360°, ya que permitirá combinar datos provenientes de diferentes dispositivos. Gracias a estos datos se obtendrá información mucho más concisa y fiable, y permitirá comprender mejor el comportamiento del consumidor.
Por ejemplo, se podrán combinar los datos obtenidos a través de un smartwatch y unas gafas inteligentes, lo que nos permitirá conocer los datos de movimiento, geolocalización y visualización al mismo tiempo. Con esta combinación de información, se podrá saber cómo compran los consumidores, cuánto tiempo dedican a mirar cada producto o si leen sus componentes y descripciones. En definitiva, esta combinación de datos recolectados nos permitirá comprender mejor cada paso del proceso de compra, así los anunciantes podrán lanzar anuncios con un contenido más relevante para el usuario, y por ende menos intrusivo, en el momento y lugar precisos. El futuro de la publicidad incluirá sin duda a los wearables como una parte indispensable de la estrategia multi-dispositivo.
¿A qué retos se enfrentan los weareables?
A pesar de todas las ventajas que conlleva la existencia de estos dispositivos, la publicidad en wearables también presenta retos para los anunciantes:
- Se trata de un mundo todavía por explorar, por lo que aún existe un gran desconocimiento
- Muchos de los dispositivos wearable, como los relojes inteligentes o las pulseras de actividad física, disponen de pantallas muy reducidas, lo que obliga a los anunciantes a buscar fórmulas más creativas para poder mostrar mensajes eficaces y que éstos lleguen a impactar al usuario.
- Para algunas de sus funcionalidades sigue siendo necesario el uso de móviles, por lo que cualquier anuncio que se ofrezca a través de los wearables tiene que permitir la opción de expandirse a una pantalla más grande. Será habitual que el usuario descubra el anuncio en su wearable, y después lo visualice en otro formato a través de su smartphone, tablet u ordenador.
- Es necesario aclarar las políticas de privacidad de datos, ya que en algunos casos no están del todo claras.
La relevancia de los wearables en los micro-momentos
Algo que es necesario destacar es la relevancia de los wearables en la creciente tendencia de los micro-momentos, ¿tienes claro en qué consisten?
Para que no haya lugar a equívoco, un momento móvil es el momento en el que un usuario utiliza su dispositivo móvil para conseguir algo que necesita en ese momento, teniendo en cuenta el contexto en el que se encuentra dicho usuario. Debido a que estos momentos son cada vez más reducidos, se les comenzó a denominar micro-momentos. Por lo tanto, un micro-momento móvil es aquel instante en el que consultas tu teléfono móvil buscando información para resolver un problema o necesidad, y donde los anunciantes tienen la oportunidad de aparecer como la solución a lo que los usuarios están buscando.
Los wearables juegan un papel fundamental en los micro-momentos, ya que muchos usuarios también utilizarán sus dispositivos wearable para tratar de solventar sus problemas y/o necesidades en un momento puntual. Por ejemplo, un usuario que esté corriendo con unas gafas inteligentes y antes de terminar su carrera le pregunta a sus gafas, a través del sistema de búsqueda por voz, por la tienda más cercana donde puede encontrar bebidas energéticas. De este modo, los anunciantes también tendrán que tener en cuenta los micro-momentos en los wearables a la hora de diseñar sus estrategias de marketing.
